Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).– Propuesta optimista frente al tiempo adverso que se cierne desde el año pasado, la exposición "Volar durante la pandemia" busca darle la vuelta al confinamiento y, en palabras de su autora, "salir al mundo con alegría, volando y bailando".
Entrevistada por El Sol de Morelia, la artista franco-mexicana Flora Goldberg (París, 1935) explicó que el proyecto de 27 óleos surgió al estar resguardada en casa a causa del Covid-19, ya que –dijo– "mucha gente no podemos salir físicamente, pero sí podemos hacerlo mentalmente, con las cosas que hacemos".
Respecto a la exposición inauguarada de manera virtual este miércoles en el Centro Cultural Clavijero (CCC), dijo que el tema recurrente de los cuadros son "bailarines y bailarinas volando", idea que nació por el encierro obligatorio y a partir de la cual ha trabajado como una apuesta por "estar bien" y darle la vuelta al escenario pandémico desde el arte.
"Siempre trabajo en mi estudio, procuramos no salir a ningún lado, pero la terapia ocupacional la tenemos todo el tiempo", dijo luego de explicar que la creación pictórica ya es, de por sí, un recogimiento frente al mundo.
Avecinada en nuestro país desde 1942, Goldberg "estudió con Diego Rivera de 1955 a 1957 y de 1956 a 1960 estuvo en la Escuela de Pintura y Escultura “La Esmeralda”, donde tomó clases con los maestros Fernando Castro Pacheco, Benito Messeguer, Carlos Estrada, Santos Balmori, Héctor García y Feliciano Peñate", según referencia del portal enlacejudío.com.
Puede interesarte: Inauguran mural Soma en Centro Cultural Clavijero
Ha sido alumna del artista gráfico Octavio Bajonero y, además de la pintura y el grabado, ha trabajado la escultura en madera.
"Llegué a México cuando tenía 7 años, todos mis estudios fueron aquí, así que de extranjera no creo tener nada", precisó.
Por el magisterio de Rivera trabó amistad con Frida Kahlo y Juan O'Gorman, entre otros artistas de la vanguardia mexicana, sin que por ello se adhiriera a alguna escuela o movimiento pictórico. Sin embargo, reconoció que después del muralismo el arte mexicano ha tenido varios periodos y el actual habla de mayor apertura y libertad.
"Como todo el mundo, el arte ha ido evolucionando, antes estaban los muralistas y obviamente la gente jóven quiso hacer un cambio y empezó el arte abstracto en todo el mundo y otras corrientes, entonces cuando llegó las galerías se volvieron muy cerradas y sólo aceptaban este tipo de manifestaciones. Por suerte, ahorita, todos los artistas pueden seguir las tendencias que prefieran –ya sea el abstracto, figurativo o las instalaciones que hacen–, en ese sentido, yo siento mucho más abierto el arte en México porque la gente puede hacer lo que siente que es arte y ya no hay una sola tendencia o escuela predominante", advirtió.
A pregunta expresa sobre su amistad con Alfredo Zalce, Flora Goldberg dijo que conoció al maestro michoacano "ya grande", cuando había dejado de trabajar. Empero, reconoció que alcanzó a tener contacto con él porque "cada vez que iba a Morelia lo visitaba y platicábamos un buen rato" –dijo– "además mi primera exposición en esa ciudad fue en el MACAZ".