Morelia, Michoacán.- Con el director artístico Arturo Diemecke al frente, la Orquesta Sinfónica de Michoacán (Osidem) dio su primer concierto de la temporada de otoño en el Teatro Ocampo.

Fue un concierto muy nutrido en asistencia, pues si bien este mismo viernes se presentó la cantante Gloria Trevi a sólo una cuadra, la Osidem logró llenar al Ocampo con un público heterogéneo, pues hubo desde infantes hasta ancianos y adultos jóvenes.

Ese público apreció la destreza del violinista Pablo Diemecke, quien estuvo como solista para la interpretación del Concierto para violín, del compositor mexicano Manuel M. Ponce.

De manera previa, un Arturo Diemecke explicó, generoso y sin pretensiones, que esta obra de Manuel M. Ponce se conforma por tres movimientos. Con ese mismo aire jovial, dio unas palabras referentes a la Sinfonía #5 en mi menor, Op. 64 de Piotr Ilich Tchaikovsky, la cual contiene cuatro movimientos.

Aunque añadió sobre esta última que "si podemos decir que hay una sinfonía romántica, es esta; encierra todos los elementos del amor". No es para menos al considerar la vida llena de melancolía y tragedias del compositor ruso.

Lo que enturbió un poco la experiencia de escuchar la obra de Tchaikovsky, fueron los sonidos de los fuegos artificiales lanzados en el exterior, que se colaron a la sala del teatro. Aunque esto pareció no importunar mucho al público ni al director.

Arturo Diemecke ha logrado reconocimiento internacional con medios como The New York Times que lo han describió como un director de orquesta de “fiereza y autoridad”.