Morelia, Michoacán.- “Lumbresueño” del cineasta José Pablo Escamilla llegó a la programación de la edición 21 del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM) para mostrar a ‘Lucas’, un joven mexicano que trabaja en la cocina de un restaurante de comida rápida, quien está sometido a las diversas presiones que ejerce sobre él su jefe, además de estar sumergido en una ciudad gris.
Después de haberse presentado este proyecto en el Festival de Cine de Venecia, este trabajo llegó a la capital michoacana para compartir con el público nacional la idea de cómo la vida puede convertirse en un túnel oscuro que también ofrece diversos caminos hacia la luz.
En rueda de prensa, el cineasta quien estuvo acompañado por parte del elenco, comentó a medios que el largometraje es un reflejo de su adolescencia que vivió en Toluca.
“Yo crecí en esta ciudad y es un lugar muy industrial donde convive una exuberante naturaleza, es un lugar mágico lleno de mitos, y además se ve este mundo industrializado, entonces en el filme vemos cómo este mundo repercute en el psique de las personas”, comentó Escamilla.
De igual forma explicó, la idea del guion nació de un luto que tuvo que atravesar fuera de México, mientras estaba en Brasil, por lo que la fotografía le ayudó a transitar por este duelo en el que se despidió de un amigo, y eso mismo se refleja en el filme.
“Lumbresueño”, dijo Escamilla, hace alusión a la salvación, mientras conjunta diversos efectos visuales y un grito que podría representar a toda una generación.
Por su parte la actriz Teresita Sánchez Reyna, explicó, pese a estar en varios filmes en la edición 21 del FICM, cada proyecto tiene una magia distinta.
“De este trabajo me enamoré, y de José Pablo Escamilla, por su calidad humana y su ser. Participar en este tipo de proyectos donde se sabe que no se va a trabajar, sino a disfrutar, es lo mejor para el actor y el público. No se vayan a empachar de mí”.
Aunque sea una historia personal, esta trama también puede convertirse en una universal con la que el espectador, sea joven o más adulto, se puede identificar en algunos momentos.
“No es una película para todo público, eso lo atiendo, lo acepto y eso está bien”, explicó José Pablo Escamilla, declaración con la que difirió la productora Diandra Arriaga, “el público mexicano es muy especial, el latino, y aunque está dirigida a todo público, es en especial para los jóvenes”.
Finalmente explicaron, en esta película también se habla del tema del suicidio y de la crisis de salud mental que existe, la cual debe seguir investigándose para ayudar a la ciudadanía.