Morelia, Michoacán (OEM/ Infomex).-Aunque hoy día Rusia es objeto de controversias por sus desencuentros con occidente, es un país que ha generado influencias en ámbitos muy diferentes al político y militar, como la literatura. Este último es el tema que abordará el traductor Jorge Bustamante García para compartir con los rusófilos de Morelia en una conferencia sobre la huella de esa nación en las letras no sólo de México, sino de todo el ámbito hispánico.
Dicha conferencia, que es parte del ciclo “El espacio literario”, se titula “La literatura rusa y los escritores hispanoamericanos: historia de una seducción” y ocurrirá el próximo martes 7 de diciembre a las 18:00 horas, en la sala ex rectores del Centro Cultural Universitario (CCU).
Bustamante García accedió a dar una entrevista para adelantar algunos puntos esenciales del conversatorio, como el hecho de que Rusia ha sido prácticamente un faro para muchas voces hispanoamericanas, que van desde el nicaragüense Rubén Darío hasta el mexicano Juan Rulfo “que fue influido por el cuento Bobok, de Dostoievski, en el que hay una conversación entre los muertos”.
“La charla comprende desde principios del siglo XIX hasta nuestros días, se trata de un viaje por ese tema (…) la historia viene desde los modernistas, con el poeta colombiano José Asunción Silva que estuvo muy influido por las ideas de León Tolstoi; Rubén Darío tradujo del francés a Máximo Gorki; es una historia que continúa con Gabriela Mistral, Pablo Neruda, César Vallejo, José Revueltas o Sergio Pitol, que tiene un libro completo llamado El viaje, que es sobre la influencia que tuvo de los escritores rusos”.
Otro caso es el de Gabriel García Márquez, que entre las fuentes que tuvo para nutrirse antes de escribir Cien años de soledad, mencionó Bustamante García, estaba El maestro y Margarita, de Míjail Bulgákov “libro que lo impactó bastante; entonces, varios escritores relevantes tuvieron una relación constante con obras de los rusos, sobretodo del siglo XIX pero también del XX”.
Cabe anotar que, de origen colombiano, Bustamante García vivió 8 años en Rusia, antes de llegar a instalarse a Morelia, ciudad en la que ha vivido desde 1988 y donde además de la traducción, se ha desempeñado como geólogo.