Morelia, Mich. (OEM-Infomex).- El director general del festival de cine fantástico, terror y ciencia ficción Feratum, Miguel Ángel Marín, aceptó que el gobierno federal y sus políticas públicas culturales pusieron contra las cuerdas no sólo al grupo que representa, sino a muchos miembros de la sociedad civil que fomentaban actividades artísticas que ahora están en peligro o de plano han desaparecido.
Tras siete años ininterrumpidos de ser un festival especializado en los géneros de terror y fantasía, el Feratum se ha tenido que conformar con ofrecer una muestra de películas los próximos 30 de noviembre y 1 de diciembre en Tlalpujahua, ya sin secciones competitivas, sin estrenos internacionales ni invitados de honor.
Entrevistado por El Sol de Morelia, Marín no duda en señalar que esta edición del festival se sacará “a empujones”, pues ante la falta de recursos hubo que rediseñar el contenido, cambiar constantemente las fechas de realización y ni pensar en premios.
No sólo es nuestro caso, varios festivales hermanos pasaron por lo mismo, algunos desaparecieron, otros sobreviven, pero nosotros tenemos un compromiso con nuestras audiencias porque nos llevó muchos años formar un público en esta parte del país, no sólo Tlalpujahua, sino Maravatío, Contepec, Atlacomulco y el mismo Toluca, así que con todo y los inconvenientes financieros, no íbamos a renunciar
El Feratum de 2019 no será festival, sino una muestra que tendrá exhibiciones no en el teatro Cenobio Paniagua, como había sucedido en años anteriores, sino en una unidad móvil que se instalará en el Jardín Zaragoza, cerca de la plaza principal de la población. Marín no quiere emplear el término “austero”, prefiere matizar, decir que habrá un formato distinto.
Aunque los carteles oficiales incluyen logos de Imcine, Gobierno de Michoacán y Ayuntamiento de Tlalpujahua, lo cierto es que ninguna dependencia pudo aportar demasiado efectivo para la realización del Feratum, confesó.
Al preguntarle si no es un desaliento para los promotores culturales que la partida federal para festivales artísticos y otros rubros se haya reducido de 500 millones en 2019 a tan sólo 150 millones de pesos en el presupuesto 2020, Marín afirma que ante esa precariedad deberán voltear a otras fuentes de financiamiento, concluyó.