Morelia, Mich. (OEM-Infomex).- El 23 de abril se celebra el Día Internacional del Libro, pero el de 2020 quizá nunca se olvide, porque en prácticamente todo el mundo no hay librerías abiertas, no existen tiendas departamentales a las cuales acudir por un ejemplar ni esos pequeños locales de libros usados que tantas veces han saciado la sed de lectura sin vaciar los bolsillos; incluso, en medio de esta pandemia, hasta prestar un libro podría ser factor de riesgo.
Apenas se incrementaron los casos de coronavirus en México y librerías como Gandhi, Fondo de Cultura Económica, Educal, El Sótano y otras con varias sucursales bajaron sus cortinas, lo mismo que las tiendas Sanborns, cuya sección de libros es de las más visitadas por los clientes.
De acuerdo al Directorio Estadístico Nacional de Unidades Económicas del Inegi, en el país existen dos mil 930 librerías de todos los tamaños, aunque una gran mayoría son pequeños establecimientos.
En Morelia, negocios independientes como El Traspatio tampoco pudieron permanecer abiertos, por lo que libran una batalla complicada: la de distribuir los ejemplares a domicilio, ofrecerlos a través de las redes sociales para que el lector habitual no baje su consumo promedio.
De reciente apertura, Silla Vacía se enfrentó a la venta en línea más pronto de lo que pensaba, pues a la par del espacio físico subió su catálogo editorial a la plataforma Issuu y también tiene algunos títulos en Amazon, el gigante de las ventas por Internet.
La empresa Librería Hidalgo también canceló su servicio presencial en las sucursales de Avenida Francisco I. Madero y colonia Chapultepec, pero ofrece su amplio catálogo por varias vías: desde sus redes sociales, en la página libreriashidalgo.com e incluso por WhatsApp, llevando ejemplares hasta la puerta de la casa sin costo adicional en el área de Morelia.
Ventas en físico y electrónico
A pesar de que los indicadores de lectura en México arrojan cifras alrededor de los tres libros per cápita por año, la industria editorial en el país reportó ventas por nueve mil 278 millones de pesos en 2018 sólo en el marcado abierto, a lo que se sumaron mil 300 millones de pesos facturados por la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos (Conaliteg). Las estadísticas forman parte de los informes de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (Caniem).
Poco a poco el libro electrónico comienza a consolidarse en el gusto de los lectores mexicanos.
El Informe Anual del Libro Digital 2019, realizado por la distribuidora Libranda, da cuenta que nuestro país es el segundo en habla hispana, sólo por debajo de España, que más compra ediciones online, para lo cual los principales distribuidores son Amazon, Apple y Google, quienes acaparan el 79 por ciento del mercado. Del total de facturas, España representa el 62 por cienti, mientras que México significa el 12 por ciento de las ventas.
Propuesto en 1988 y consolidado en 1995, el Día Internacional del Libro se celebra por iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), con lo que persigue incentivar el gusto por leer, poner foco en la industria editorial y proteger la propiedad intelectual a través del derecho de autor.
