Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Con “Bardo, falsa crónica de unas cuantas verdades” de Alejandro González Iñárritu y “Pinocho” de Guillermo del Toro, el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM) celebró por todo lo alto su 20 aniversario.
Además, en esta edición que revistió una gran emotividad dado que es la primera que se realiza de manera totalmente presencial después de la pandemia del Covid-19, se entregó un reconocimiento al diseñador Eugenio Caballero y se le otorgó una butaca al cineasta Carlos Carrera.
La premisa para el 2023 es el retorno de Salma Hayek a suelo moreliano, lo que tendría un gran valor simbólico dado que la actriz mexicana participó en la primera edición, anunció Alejendro Ramírez, motor del Festival.
Otro tema que ya se prepara para la siguiente edición es el restablecimiento de los talleres cinematográficos que durante parte de su trayectoria lo caracterizaron, señaló.
“Buscaremos traer más propuestas de cine, tener más público. Quizá lo que nos falta es restablecer más talleres que se vieron afectados por la pandemia. La idea es volverlos a tomar para apoyar con capacitación a los nuevos realizadores”, afirmó Alejandro Ramírez el presidente del Festival.
Ramírez aseguró que este encuentro sí es uno de los mejores en México.
“Sin duda, es de los festivales mejor posicionados y que tienen mayor proyección en México y quizá en toda la región de Latinoamérica “, dijo.
LOS MOMENTOS MEMORABLES
Sumando cuatro de sus películas en inauguraciones del Festival Internacional de Cine de Morelia, Alejandro González Iñárritu hizo su presentación formal al lado de los fundadores del evento y de los actores de su nueva cinta, “Bardo”.
En la alfombra roja, se dio tiempo para saludar y tomarse fotos con los cientos de seguidores que se dieron cita alrededor del Teatro Matamoros.
Sobre su película el galardonado cineasta mexicano confesó haberla abordado desde la “melancolía y el humor”.
Más tarde, luego de la gran expectativa por escucharlo en una máster class, con decenas de personas formadas afuera del Centro Cultural Universitario, Alejandro González Iñárritu habló detalladamente de su más reciente película, la cual describió como una ficción sobre el momento actual de su propia vida.
"Bardo parte del alma que se queda en el limbo, o algo que muere y está por renacer", explicó el cineasta para diseccionar el origen del proyecto que se enfrentó a las complicaciones de la pandemia, por lo cual hubo tres equipos de preproducción.
Silverio Gama, el protagonista interpretado por Daniel Giménez Cacho, "está entre la realidad y la ficción, entre la vida y la muerte, entre la dualidad de ser padre y ser hijo", dijo Iñárritu, quien agregó que una de las cosas más difíciles es elegir el casting, porque "si te equivocas ahí, no hay forma de salvar la película".
Añadió que Daniel es "el mejor actor de México, pero lo importante es que nos parecemos mucho, tenemos la misma edad. Él era Silverio Gama. Lo que hizo él fue increíble, porque interpreta a un fantasma que se enfrenta a sus miedos y no sobreactuó, borró el artificio de actor".
Acompañado por Daniela Michel, González Iñárritu aceptó que en “Bardo” hay una semilla de "Birdman", porque en ambas hay un hombre enfrentado a un dilema. Además, en la instalación de "Carne y Arena" hay una experiencia inmersiva que también se ve en el filme que se estrenó en Morelia.
Guillermo del Toro y pinocho
Otro de los artistas de referencia del festival es Guillermo Del Toro, quien a través de un video proyectado antes de la proyección de la premiere de “Pinocho”, explicó porque no podía estar presente.
“Amigos de Morelia, lamento muchísimo no estar ahí hoy por motivos personales de causa mayor, me hubiera gustado estar ahí, el FICM es un tesoro nacional. Esta película que van a ver se tardó de 14 a 15 años en hacerla, la mitad de mi carrera, porque se quiso hacer demostrando que la animación es arte”.
Del Toro, recordó a través del clip, fueron mil días los que se llevó la filmación de la película, y gran parte de ella se rodó en Guadalajara, “con animadores tapatíos y varias partes de México, pues en el país hay un movimiento de stop motion importantísimo”.
Carlos Carrera devela su butaca en el FICM
En esta edición, el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM) estrenó nueva butaca, y en esta ocasión fue Carlos Carrera el reconocido con su nombre en este asiento que permanecerá en el Cinépolis Centro de la capital michoacana, sede que se ha convertido en el ‘corazón’ del encuentro cinematográfico.
“Yo he venido varías veces y me da mucho gusto, es un honor, no me queda más que dar las gracias por el trabajo que realizan para la difusión del cine”, fue lo que comentó Carrera muy brevemente, antes de la proyección de su trabajo “Pasitos a la fama”, realizado en Cinépolis Centro.
Eugenio Caballero recibe el Premio Cuervo en el FICM
Eugenio Caballero, Diseñador de Producción y Director de Arte que ha destacado por su trabajo en proyectos como “Roma”, “El laberinto del fauno”, “Lo imposible”, y más reciente “Bardo, falsa crónica de unas cuantas verdades”, recibió este 2022 el Premio Cuervo que consta de 120 mil pesos, en el marco de la edición 20 del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM).
“El FICM me da mucha vida, siento que parte de lo que a mí me sigue moviendo es ver cine, no nada más hacerlo sino verlo, y no hay mejor lugar para hacerlo que el Festival Internacional de Cine de Morelia”.
Caballero reconoció y agradeció la distinción del FICM, y que el público sepa qué otros papeles se desenvuelven detrás de una cinta.
El diseñador celebró que en el país haya una gama tan vasta de historias, desde lo más experimental hasta lo comercial, pasando por el cine de género.
Ruido, sobre desaparecidos
Una de las películas que más expectativas despertó fue “Ruido”, de Natalia Beristáin, que cuenta la historia de una madre desesperada e inmersa en la búsqueda de su hija que lleva nueve meses desaparecida.
En su tercer largometraje, Beristáin muestra a ‘Julia’, una de las tantas mamás, hermanas, hijas, compañeras que han sido atravesadas por alguna de las muchas violencias de un territorio, el mexicano, que está en guerra con sus mujeres.
En su ardua búsqueda, ‘Julia’ clama encontrar a su hija ‘Gertrudis’, por lo cual, irá tejiendo redes con distintas mujeres y sus diversas luchas.
Esta película tuvo un trabajo de investigación al sumar las voces, rostros e historias que en la vida real han sido atravesadas por esa situación, recordó la directora.
Días borrosos: la primera película mexicana sobre la pandemia
En el aspecto de la producción cinematográfica, es de resaltar que el cine mexicano ya tiene su primera historia sobre la pandemia.
Se trata de "Días borrosos", largometraje de Marie Benito que forma parte de la selección oficial del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM).
La coproducción México-Francia, de corte independiente, narra los días de una mujer que recién ha cumplido los 40 años de edad y, en medio de los contagios por coronavirus, comienza a tener un gran deseo por convertirse en madre por primera vez.
Así conocerá a Felipe, hombre de 80 años, viudo, que prácticamente está a la espera de la muerte.
En conferencia de prensa, la realizadora subrayó que el guión lo escribió desde hace 10 años, en un contexto de la soledad de dos personas, pero una vez que llegó el virus, adaptó el relato junto a Paula Markovich.
El mambo llegó a Morelia con el estreno de El sueño de ayer
Con la presencia de Rubén Albarrán, vocalista de Café Tacvba, se realizó la alfombra roja de la película “El sueño de Ayer”, dirigida por Emilio Maillé, como parte del Festival Internacional de Cine de Morelia.
Minutos previos a la proyección, la calle Abasolo se vio invadida por los músicos de la Orquesta de Pérez Prado, quienes interpretaron los mejores mambos para darle color a esta cinta que justo le rinde un homenaje al músico que dio vida a este género musical.
En entrevista para El Sol de Morelia, Maillé detalló que se trata de una historia adentrada en la magia que produce la música, pues se ubica en la época actual, una de un país "casi en ruinas" a donde llega Dámaso Pérez Prado, interpretado por Albarrán, para buscar a una mujer de la que estuvo enamorado.
El largometraje rinde culto a una época en la que las orquestas musicales estelarizaban las noches en la Ciudad de México, lo que se veía reflejado en el llamado cine de rumberas.
Sabina, presente
No menos importante fue la presentación del documental sobre el cantautor Joaquín Sabina.
Resumir más de siete décadas de vida en un sólo proyecto, con una duración de 120 minutos, puede ser una tarea muy compleja, sobre todo a la hora de seleccionar los aspectos más importantes de uno de los iconos de la música y con un fandom que rompe fronteras.
Sin embargo, lejos de enfrascarse en resumir cada año, el director Fernando León de Aranoa extrajo la verdadera esencia de Joaquín Sabina y logró proyectarlo en el documental Sintiéndolo mucho, mismo que formará parte de la cartelera +Que Cine, de Cinépolis, el 18 y 19 de noviembre.
El trabajo se desarrolló durante trece años, de la mano del cantautor, poeta y pintor español, quien abrió la puerta a su lado más íntimo.
"Fue una propuesta suya, fue él el que me hizo la invitación de emprender un viaje sin saber a dónde nos llevaría; para mí era un privilegio y un orgullo y esa era la intención de este documental, compartir con el espectador lo que he vivido como un privilegio con él, su conversación, su proximidad, su cercanía.