Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- En el conversatorio Mujeres, memoria e historia, la titular de la Secretaría de Igualdad Sustantiva y Desarrollo de las Mujeres Michoacanas (Seimujer), Carolina Rangel Gracida destacó que más del 50 por ciento de la población de adultos mayores son mujeres.
El espacio del conversatorio en cuestión ocurrió en la Casa Natal Morelos, donde Rangel Gracida habló sobre el tema porque ese fue uno de los tópicos de los que se habló. "Las adultas mayores son más allá que cuidadoras, ¿quién cuida de ellas?, ¿quién las acompaña?", asimismo, expresó que ellas también tienen derecho al disfrute en espacios culturales o deportivos, por lo cual "como estado tenemos esa responsabilidad".
"Ya lo ha dicho el presidente Andrés Manuel López Obrador, tenemos que asegurar una vejez digna y lo que busca el gobierno es la ampliación de derechos", agregó Rangel Gracida.
Por su parte, Irma Nora Valencia, secretaria técnica de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), destacó la necesidad de que las mujeres conozcan cuáles son los derechos, como un conocimiento que puede ser punto de partida.
La historia
A propósito de los derechos, en ese conversatorio la historiadora e investigadora, Lisette Rivera Reynaldos relató cómo fue el proceso que hizo posible la adquisición de derechos para el género femenino, "a partir de la mitad del siglo XIX se dieron cambio sutiles en el papel de la mujer en lo social".
Y es que se entendió que la primera educadora de los ciudadanos eran las mamás y por eso era necesario darles educación, "la idea de la mujer formadora favoreció la educación de las mujeres", aunque eso sí, en principio no era para el beneficio de ellas sino para fortalecer un rol. Entonces, en 1858 fue abierta la primera escuela secundaria para mujeres.
A partir de 1880 ya empezaron a egresar las primeras mujeres del grado de educación superior "nunca hemos sido actrices pasivas, nos hemos involucrado y, como cualquier colectivo oprimido, debíamos utilizar las oportunidades para colarnos por ahí".
Luego, contó que en las primeras décadas del siglo XX las mujeres se empezaron a involucrar en organizaciones laborales. Luego se involucraron en la Revolución Mexicana, un fenómeno en el cual "identificamos a las soldaderas y adelitas, pero iban más allá; había periodistas, las hubo quienes llegaron a tener grados militares, como La Güera Carrasco o Ramona Alatorre".
Además, la participación femenina en la Revolución, mencionó Rivera Reynaldos, fue un parteaguas para mayores cambios legales y sociales. "Se dice que la ley de relaciones familiares debe mucho a Hermila Galindo", la cual fue parte del gabinete de Venustiano Carranza y la cual "ya desde entonces hablaba del derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo".
Para 1934 fue conformado el Frente Único por los Derechos de la Mujer, mientras que Lázaro Cárdenas intentó reformar la ley para dar la ciudadanía a las mujeres pero el congreso de entonces lo detuvo. No fue sino hasta 1953 en que el estado mexicano abrió las puertas a la posibilidad del voto y ciudadanía plena.