Morelia, Michoacán-(OEM-Infomex).- Ropa que pueda ser utilizada tanto por mujeres como por hombres, es lo que propone Casiopea, una marca creada por la artista teatral y diseñadora Ana Sifuentes junto a su hermana Carla, que mostrarán su trabajo este sábado, en una pasarela que ocurrirá en Jeudi 27.
En entrevista exclusiva, Ana Sifuentes contó que mediante su propuesta creativa buscan desdibujar los límites de género, para normalizar que un hombre utilice flores o faldas por ejemplo.
Para lograr esto recurrieron a diseños muy coloridos, con estampados y telas que brillan bajo luces nocturnas, como las que habrá este sábado en el Jeudi27 (calle Valentín Gómez Farías, 265 centro de Morelia), en un evento donde las hermanas presentan la primer colección de Casiopea, llamada Flores y neón.
“Iniciamos hace tres años, desde entonces hemos promovido los artículos y esta es nuestra primera colección como tal, aunque en general toda nuestra ropa está pensada en desaparecer el género porque la marca es queer”.
En la pasarela de este sábado, el público podrá mirar 20 conjuntos distribuidos en 9 modelos, que caminarán con música de fondo interpretada por DJ Moni G; también habrá piezas a la venta en el espacio.
Personalizar el diseño
Pero la deconstrucción del género no es la única postura social que tienen las hermanas Sifuentes, quienes también proponen generar diseños únicos, en los que se utilicen telas artesanales.
“Nuestra idea es generar ropa desde la artesanía, que no se vuelva una producción en serie; es decir, aparte de los conjuntos de la colección, cuando nos adquieren una prenda indagamos con la persona sus medidas o el tipo de telas que le gustan. Por otro lado, ahora sí usamos insumos industriales pero estamos buscando sustituirlas con artesanales”.
Lo anterior es la propuesta y un tema distinto es la recepción, un área donde Ana Sifuentes ha visto una buena aceptación por personas jóvenes de ambos géneros, incluso mayor entre los hombres.
Sin embargo, ha sido un camino complejo que bien conoce Ana Sifuentes: “en general, me parece que como artista local siempre es complicado posicionarse sobre todo en Morelia, donde la gente voltea a ver primero a los creadores foráneos que vienen o visitan”.
Pese a dicha dificultad, Ana Sifuentes y su hermana han apostado por la permanencia como estrategia definitiva, “la solución es aferrarte, estar constantemente y que la gente empiece a escuchar tu marca o nombre, nosotras ya tenemos seguidores que saben lo que hacemos y nos compran, pero eso es a partir de no bajar la guardia”.
El origen de la vocación
A la pregunta de cómo nació el proyecto de una marca de ropa, aunque ella se dedica al teatro y su hermana a la nutrición y la gastronomía, Ana Sifuentes se tomó tiempo para relatar que en realidad se trata de una vocación que habitaba en ella desde la infancia.
“Igual que las artes escénicas, con el diseño de modas tuve un interés fuerte, porque desde niña me era importante la forma de vestir e incluso ya escogía mi propia ropa; al estar en la adolescencia, empecé a remodelar la indumentaria que ya tenía y descubrí que podía hacerla desde cero”.
Si bien se trató de un campo en el que no estudió, sí continuó su desarrollo en esa área a la par que hacía otras cosas. “Le pedí a mis papás de regalo una máquina de coser, y con esta me dieron un mini curso de corte y confección, hice algunas cosas y al llegar a vivir a Morelia me percaté que había gente a quienes sí les gustaba los diseño, luego vino también mi hermana, se unió al proyecto y sistematizamos con la marca”.
