Morelia, Michoacán.- Además de las famosas iglesias que han quedado enterradas en los municipios de Churumuco y San Juan Parangaricutiro, existe otro lugar que también terminó con su sepultura, se trata del templo el Carmen, ubicado en el pueblo mágico de Tlalpujahua.
Es de mencionar que, Tlalpujahua es un pueblo mágico con un pasado minero al igual que Angangueo, y hoy en día es más conocido por ser la eterna navidad sus famosas esferas, así como uno de los lugares cercanos a los santuarios de la mariposa monarca.
Este pueblo mágico vivió a finales del siglo XIX la explotación de minerales como oro y plata, siendo la primera productora a nivel mundial.
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Pero todo esto cambió en 1937, cuando las aguas residuales y tóxicas que provenían de la mina Dos Estrellas desembocaron en el barrio Del Carmen, pues por un error técnico terminó no solo con los pueblos, sino con la vida minera.
Lo único que quedó de este pueblo sepultado es una visible torre de la iglesia, y se han hecho algunas excavaciones que simulan pasillos, y actualmente se puede visitar. Además de esta torre del recinto religioso, queda en pie un hermoso ángel.
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Hasta marzo de 1998, la antigua mina se volvió como Museo Tecnológico Minero del siglo XX, para promover la historia y cultura minera de esta región.
