Estamos en la etapa de precampañas y los protocolos para elegir a quienes habrán se ser candidatas y candidatos a los cargos de elección popular de las elecciones del próximo año, por ello es previsible que haya movimientos, pronunciamientos y esa puja por el poder en diferentes ámbitos.
En Nuevo León se registró, en su momento, una serie de movimientos que apuntan a la anarquía para saber quién se quedaría en el sitio del aspirante presidencial Samuel García, el mandatario regio no tiene mayoría en el Congreso del Estado, presionó para dejar al secretario general de Gobierno en La Sultana del Norte aunque ya el Poder Legislativo había optado por alguien ajeno al círculo del gobernador con licencia. Al final regresó a su despacho como gobernador Samuel García.
Samuel García tiene fortalezas en las redes sociales debido, en gran medida, al apoyo de su pareja quien es experta en la materia. El gobernador de Nuevo León y sus dichos no exentos de frivolidad, novato en política aunque habilidoso en términos mediáticos, habrá que esperar para saber quién será el abanderado de Movimiento Ciudadano y su sempiterno dirigente Dante Delgado.
Xóchitl Gálvez luce abandonada por los dirigentes de los partidos que la postulan, ellos parecen estar más interesados en su acomodo de cara a los próximos comicios, qué curul se habrán de agenciar para continuar al frente de la administración de numerosos fracasos electorales que se cuentan en creciente cantidad.
Xóchitl parece rezagada, su campaña no se ha reforzado, ocupa un auténtico coordinador de campaña que sepa trabajar a ras de tierra, su inicial presentación fue exitosa en términos de publicidad gracias al presidente Andrés Manuel López Obrador, aunque en las últimas semanas va a la baja porque dejó su estilo original, ella se decía candidata ciudadana aunque su respaldo está en partidos tradicionales que en los últimos años van a la baja, tanto que el Partido de la Revolución Democrática casi se ha extinguido.
En Morena no se perciben tantos problemas, en gran medida porque el activo principal radica en el presidente Andrés Manuel López Obrador que ha legitimado las nominaciones, principalmente hasta el momento la elección de Claudia Sheinbaum por la presidencia y de Clara Brugada a la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México.
No hay grandes cambios en las alineaciones de la clase política, se observa a las mismas caras, mismos directorios y procedimientos. Es notoria la falta de liderazgos emergentes, con sus excepciones, el reciclaje está a todo lo que da para exhibir el apetito de poder que es consustancial a la condición humana desde el fondo de los tiempos.
Hace unos días tuvimos la oportunidad de ver la película Napoleón de Ridley Scott y estelarizada por la actriz Vanessa Kirby -seguramente la mejor en escena- y Joaquin Phonix -ganador del premio de la academia-; evocar al nacido en Córcega y posteriormente emperador de Francia es hacerlo con la Revolución Francesa de 1789, en ese tiempo nació la ahora conocida geometría política de la derecha y la izquierda.
En esos tiempos convulsionados en Francia destacarían algunos cuadros como Robespierre y Danton, entre muchos más que abolieron al antiguo régimen aunque también impusieron el terror en los mandos para ejecutar a sus enemigos políticos, si, porque nunca ocultaron su apetito por el poder.
Presidente de la Crónica de Paracho 2020-2022, Trabajó como Secretario en Secretaría de Difusión Cultural y Extensión Universitaria.