/ martes 2 de mayo de 2023

Acuerdo de coordinación… con calzador

Hace casi 20 meses, el 5 de octubre de 2021, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla y el alcalde moreliano, Alfonso Martínez Alcázar, presumían en sus redes sociales su disposición para trabajar juntos en pro del desarrollo de la capital michoacana. Al final, pasaron del Trabajar juntos para que “Morelia brille de nuevo” al “juntos, pero no revueltos”.

Esta semana se volverán a ver las caras ambos mandatarios, ya no en una cafetería, sino en una reunión institucional para formalizar un convenio en materia de seguridad. Seguramente habrá la misma cordialidad y amabilidad, pero ya no la misma confianza con la que se reunieron para disfrutar de un café casi al inicio de sus gestiones porque en este tiempo ha quedado claro que no solamente impulsan proyectos distintos, sino también que ambos entienden que el fracaso de uno es el éxito del otro.

Para nadie es un secreto que Martínez Alcázar tiene en la mira la candidatura al gobierno michoacano y fracasar como alcalde prácticamente sepultaría sus aspiraciones; y para Morena, recuperar Morelia representaría un verdadero triunfo electoral, pero eso se logrará, entre otras cosas, con el fracaso del proyecto que promueve el hoy alcalde, ex panista y ex independiente.

Policía Auxiliar con calzador

La ocurrencia del gobernador Alfredo Ramírez Bedolla de enviar a elementos de la Policía Auxiliar a vigilar bares y antros ha metido en un berenjenal a las diversas áreas involucradas porque no le encuentran la cuadratura al círculo. Nadie duda que se trate de una genuina preocupación, pero muestra, una vez más, que la estrategia de seguridad además de ser reactiva es de ocurrencias.

Hasta el momento, de acuerdo con el director de la Policía Auxiliar, Juan Eulogio Sandoval, la propuesta podría estar orientada a que los elementos de la corporación realicen rondines de vigilancia a un determinado número de establecimientos comerciales, en lugar de destinar uno o dos elementos a cada antro, lo cual resulta, además de absurdo, materialmente imposible.

Estos rondines se verían reforzados con la presencia de la Policía Morelia y con ello brindar mayor seguridad a quienes asistan a estos lugares. Por lo pronto ya se capacita a los nuevos elementos de la Policía Auxiliar en diversos protocolos: primer respondiente, cadena de custodia, manejo de armas, especialmente ahora que algunos tendrán a su cargo armas largas.

La pregunta que ronda por la mente de la gente es si los ataques registrados recientemente en Morelia -los homicidios en el restorán Puerto Aguachilería, la agresión en Plaza U, la quema de tres bares en Altozano, los asesinatos dentro del panteón Gayosso, etc.- hubieran podido evitarse si hubieran contado con Policía Auxiliar. Resulta difícil pensar que la presencia de elementos de esta corporación sea la respuesta a los problemas de inseguridad que afecta Morelia y una docena de municipios.

Tarímbaro en camino de convertirse en polo industrial

Desde el anuncio de la apertura de operaciones del parque industrial Eleva Park, Tarímbaro ha comenzado su transformación de “ciudad dormitorio” a uno de los centros industriales más importantes de Michoacán y para continuar fortaleciendo este proyecto, varios empresarios michoacanos han acudido a China para exponer las ventajas de invertir en dicha entidad.

El trabajo del acalde Bladmir González ha sido fundamental, primero para la concreción de este proyecto de capital 100% privado, y segundo, para garantizar su consolidación, proyectada para dentro de dos o tres lustros.

Ley sobre Delitos de Imprenta a la basura de la historia

Pasó casi desapercibido todo el proceso de abrogación de la Ley sobre Delitos de Imprenta que concluyó, por fin, con la publicación en el Diario Oficial de la Federación el pasado 25 de abril. Una Ley que nunca debió existir y que sirvió durante un siglo para la persecución y castigo de periodistas generalmente críticos del régimen.

Resulta extraño e incluso contradictorio que sea durante el gobierno del presidente López Obrador, caracterizado por su permanente crítica a los medios de comunicación, que se concrete una petición de organizaciones en defensa de la libertad de expresión y protección de periodistas que había sido ignorada por quienes hoy son “férreos defensores del derecho a la información.


Especialista en telecomunicaciones.

Hace casi 20 meses, el 5 de octubre de 2021, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla y el alcalde moreliano, Alfonso Martínez Alcázar, presumían en sus redes sociales su disposición para trabajar juntos en pro del desarrollo de la capital michoacana. Al final, pasaron del Trabajar juntos para que “Morelia brille de nuevo” al “juntos, pero no revueltos”.

Esta semana se volverán a ver las caras ambos mandatarios, ya no en una cafetería, sino en una reunión institucional para formalizar un convenio en materia de seguridad. Seguramente habrá la misma cordialidad y amabilidad, pero ya no la misma confianza con la que se reunieron para disfrutar de un café casi al inicio de sus gestiones porque en este tiempo ha quedado claro que no solamente impulsan proyectos distintos, sino también que ambos entienden que el fracaso de uno es el éxito del otro.

Para nadie es un secreto que Martínez Alcázar tiene en la mira la candidatura al gobierno michoacano y fracasar como alcalde prácticamente sepultaría sus aspiraciones; y para Morena, recuperar Morelia representaría un verdadero triunfo electoral, pero eso se logrará, entre otras cosas, con el fracaso del proyecto que promueve el hoy alcalde, ex panista y ex independiente.

Policía Auxiliar con calzador

La ocurrencia del gobernador Alfredo Ramírez Bedolla de enviar a elementos de la Policía Auxiliar a vigilar bares y antros ha metido en un berenjenal a las diversas áreas involucradas porque no le encuentran la cuadratura al círculo. Nadie duda que se trate de una genuina preocupación, pero muestra, una vez más, que la estrategia de seguridad además de ser reactiva es de ocurrencias.

Hasta el momento, de acuerdo con el director de la Policía Auxiliar, Juan Eulogio Sandoval, la propuesta podría estar orientada a que los elementos de la corporación realicen rondines de vigilancia a un determinado número de establecimientos comerciales, en lugar de destinar uno o dos elementos a cada antro, lo cual resulta, además de absurdo, materialmente imposible.

Estos rondines se verían reforzados con la presencia de la Policía Morelia y con ello brindar mayor seguridad a quienes asistan a estos lugares. Por lo pronto ya se capacita a los nuevos elementos de la Policía Auxiliar en diversos protocolos: primer respondiente, cadena de custodia, manejo de armas, especialmente ahora que algunos tendrán a su cargo armas largas.

La pregunta que ronda por la mente de la gente es si los ataques registrados recientemente en Morelia -los homicidios en el restorán Puerto Aguachilería, la agresión en Plaza U, la quema de tres bares en Altozano, los asesinatos dentro del panteón Gayosso, etc.- hubieran podido evitarse si hubieran contado con Policía Auxiliar. Resulta difícil pensar que la presencia de elementos de esta corporación sea la respuesta a los problemas de inseguridad que afecta Morelia y una docena de municipios.

Tarímbaro en camino de convertirse en polo industrial

Desde el anuncio de la apertura de operaciones del parque industrial Eleva Park, Tarímbaro ha comenzado su transformación de “ciudad dormitorio” a uno de los centros industriales más importantes de Michoacán y para continuar fortaleciendo este proyecto, varios empresarios michoacanos han acudido a China para exponer las ventajas de invertir en dicha entidad.

El trabajo del acalde Bladmir González ha sido fundamental, primero para la concreción de este proyecto de capital 100% privado, y segundo, para garantizar su consolidación, proyectada para dentro de dos o tres lustros.

Ley sobre Delitos de Imprenta a la basura de la historia

Pasó casi desapercibido todo el proceso de abrogación de la Ley sobre Delitos de Imprenta que concluyó, por fin, con la publicación en el Diario Oficial de la Federación el pasado 25 de abril. Una Ley que nunca debió existir y que sirvió durante un siglo para la persecución y castigo de periodistas generalmente críticos del régimen.

Resulta extraño e incluso contradictorio que sea durante el gobierno del presidente López Obrador, caracterizado por su permanente crítica a los medios de comunicación, que se concrete una petición de organizaciones en defensa de la libertad de expresión y protección de periodistas que había sido ignorada por quienes hoy son “férreos defensores del derecho a la información.


Especialista en telecomunicaciones.